Creer en libertad.
El pasado miércoles cuatro de diciembre, los liberales de México nos dimos cita en el Club France, un elegante recinto al sur de la ciudad, para charlar sobre un tema polémico y pocas veces discutido: la relación entre la libertad, la religión y el Estado. El evento se dividió en dos secciones principales, una antes del almuerzo, que consistió en una serie de tres conferencias en torno al tema central del encuentro; y el segundo segmento, posterior al almuerzo, en el que se presentó la obra prima de nuestro querido José Torra, el libro “Jonestown, Religión y Socialismo”.
La primera ponencia que corrió a cargo de Ángel Corro, llevó por título “Cristianismo, Libertad y homosexualidad”. En ella se defendió el derecho de los cristianos más conservadores a repudiar las manifestaciones LGBT, al mismo tiempo que se desnudaba cuál injustificado es su intento por usar la violencia del Estado para imponer sus ideas; para ello, el expositor se valió de argumentos tomistas sobre el libre albedrío que son más que compatibles con el origen del liberalismo y su extensión lógica, el libertarismo.
La siguiente charla fue cortesía del profesor de filosofía Dr. José Antonio Pardo Oláguez, llamada “Estado, prácticas sacrificiales y libertad”, se remontó a la filosofía cristiana desde el medioevo, para argumentar una compatibilidad totalmente posible entre las premisas básicas del liberalismo y del cristianismo.
Para finalizar el bloque, pudimos escuchar al exsecretario de educación pública Fausto Alzati Araiza, que respondió a la pregunta “¿Son compatibles la libertad y la religión?”. El Dr. Alzati comenzó argumentando falazmente la inexistencia de dios, con un método más que cuestionable. Continuó diciendo que toda religión es enemiga natural del pensamiento libre e inteligente (Como seguramente San Agustín, Santo Tomás, Gabriel Zanotti o el mismo Dr. Pardo demuestran). Tras alabar la sustitución de la deidad extraterrenal por la deidad dictatorial comunista en Cuba, abogó por que los padres de familia tengan prohibido por el supremo poder del Estado, transmitir su religión a sus hijos; hay que ver que para nuestro honorable doctor apócrifo, el gobierno tiene derechos más poderosos que los padres sobre los seres que han procreado. Su conclusión, simple e infundada, es que la religión no sólo no es compatible con la libertad, sino que es su enemiga.
Posterior al almuerzo, proseguimos a la presentación de la opera prima de José Torra Alfaro “Jonestown, Religión y Socialismo”, obra cuyo aporte es suficiente para una reseña aparte. Participaron Eric Araujo Martínez, como moderador, el Dr. Pedro Arturo Aguirre y el autor. Tras escuchar algunos datos sobre el Movimiento Libertario de México y agradecer el apoyo que nuestro amigo Víctor Hugo Becerra y la Fundación Friedrich Naumann nos han brindado. El Dr. Pedro Arturo Aguirre comentó la conveniencia de la obra para su investigación en curso sobre el culto a la personalidad en ciencias políticas, recordando la relación entre Jim Jones y los ideales socialistas que condujeron a los sucesos lamentables de Jonestown en Guyana; el doctor, concluyó relacionando la idolatría a un líder con la fatalidad, ejemplificando con Stalin, Mao, Hitler y otros colectivistas que guardan una relación estrecha y no siempre evidente con el creador del Proyecto Agrícola del Templo de la Gente. José Torra comentó los pormenores que lo motivaron a realizar ésta, su primera obra, y aprovechó para advertir de los peligros de los líderes carismáticos que aprovechan momentos idóneos para hacerse de poder infinito, de poder letal.
Los invitamos a leer la obra y enviarnos sus comentarios. Agradecemos a todos quienes nos acompañaron aquél día y esperamos verlos pronto en algunos de nuestros siguientes evento.
La obra se encuentra para descargar en el siguiente link.
http://www.la.fnst.org/index.php/biblioteca-de-la-libertad/biblioteca-de-la-libertad-en-america-latina/item/download/49_b09f8baf6a140990145e6a8c989b9752